Nos sentimos únicos e irrepetibles, miramos al otro como si no tuviera nada que ver con nosotros.
Somos diferentes y aún sin saberlo y sin darnos cuenta somos extensiones del campo universal de energía.
Ese tomar conciencia va expandiendo la energía, manifiesta su existencia con partículas activas, donde el todo está en la parte y la parte garantía de que todo es equilibrio y todo Fuente de Vida.
¿Cada uno de nosotros, somos una versión del sí mismo?
¿Cada uno de nosotros somos parte de la misma conciencia universal?
Aunque no nos demos cuenta de ello, nada lo cambia.
No hay dentro ni fuera, es una forma de mirar, lo vives y experimentas formando una realidad, la mente es la que lo crea para que puedas jugar, el juego de la materia en la dimensión que estás. Lo que Es no tiene forma y no se puede aislar, la Conciencia es solo una más allá de la realidad.
Decimos que el otro es el espejo donde mirarnos.
Pero no nos damos cuenta, no lo practicamos.
Si somos espejos de los demás tenemos que aprender a vernos en ese reflejo.
Una buena reflexión que se escapa al instante porque al haber división no ves que puedas mirarte, ya que te sientes aislado, no sabes que puede enseñarte, todo aquello que está en ti y no lo habías visto antes.
Al descubrir la unidad es cuando ves el mensaje, observas con curiosidad que es lo que puede mostrarte y eso te lleva a ver lo que en ti está y ocultaste, te trae nuevas referencias de aquello que no miraste y ahí es donde te das cuenta que en realidad es un Ángel, que hizo un pacto contigo que la Unidad es su lenguaje, pero lo tiene dormido al igual que tú aceptaste.
Se presenta la ocasión tantas veces necesites hasta entender el proceso de la magia que ahí existe al poder escuchar lo que el otro te trasmite.
Para alcanzar esta unidad de conciencia hay que experimentar en la red de relaciones que mantenemos con la familia, los amigos, la pareja, los compañeros de trabajo.
¿Cómo experimento y descubro esta realidad?
Se presenta tantas veces que al final te preguntas, qué está pasando aquí y ya no cabe ninguna duda, porque ves con claridad que donde había espesura todo es simple y sencillo, se recobra la cordura de ver todo como es, sin límites ni fisuras. Ya no hay por qué luchar para ganar el combate, ves tan claro y conciso que es de ti una parte, que al ser reconocida ya no tiene que negarse y eso te lleva a crecer, es el comienzo de amarte.
Cuando estoy amando, acepto y amo en el otro todo aquello que acepto y amo de mí.
Y cuando estoy rechazando, está claro que niego aquello que rechazo del otro que es lo que no quiero aceptar de mí, si no nada de esto me molestaría.
Ciertamente, es principio de coherencia sentir las fuerzas unidas, es admitir la presencia de energías compartidas que activan la conciencia, donde no hay nada que se reprima es un estar alerta.
Por eso nos sentimos atraídos por ciertas personas porque tienen características similares a las nuestras.
Te atrae lo que amas y niegas lo que rechazas, es estar atrapado aunque hay hermosas alas, mientras esto no se ve se trabaja una cara, pero la moneda es única y a la vez necesaria para que haya equilibrio y no carente de nada.
En la naturaleza del Universo, existen y coexisten valores opuestos. No podemos ser una sola cosa sin ser también su contrario.
Un principio vital que ha de ser reconocido, aceptado y admirado y a la vez es sencillo, impulsa la creación al juego de lo divino, pero a la vez se trasciende y ya no se ve lo mismo lo opuesto queda integrado en un sendero infinito.
Somos un gran potencial de luz y oscuridad, aceptarlo y comprenderlo es sanar heridas.
Es un paso en el proceso que te ayuda a caminar, te sirve como concepto, pero ahí hay mucho más, la Unidad no tiene opuesto pero al experimentar es la herramienta que sirve para poderlo expresar.
Somos seres multidimensionales, todo lo que existe en algún lugar del mundo existe también en nosotros.
Es Conciencia de Unidad donde todo se contiene, no hay separatividad esto lo crea la mente.
Necesitamos comprender y reconocer que lo positivo y negativo está en nosotros, pero que eso no significa que seamos seres imperfectos.
Somos seres completos y descubrirlo es tener conciencia de unidad.
Más allá de comprender, reconocer y descubrir, te sabes Ser que Es la Fuente de todo existir.
Autora: Rosa Caminante
No hay comentarios:
Publicar un comentario