El proceso de visualización te permite crear una clara imagen o sentimiento en
tu mente y dar a esta imagen energía y realidad. La clave está en repetir el
proceso una y otra vez. Esto funciona para situaciones de la vida tanto a corto
como a largo plazo. Si estás a punto de ir a una importante entrevista de
trabajo, o vas a hacer una propuesta relevante o decides acercarte a alguien que
te gusta, entonces puedes adelantar la situación y atraer energía positiva para
visualizar esa escena concreta y cómo te gustaría ver que esta se desarrolla
Tu objetivo puede ser a nivel físico: puedes estar enfermo, agotado, nervioso o
deprimido; emocional: puedes haber tenido una discusión con alguien en el
trabajo, o con tu pareja, o tratas de encontrar la manera de decir a alguien algo
doloroso; mental: tienes un examen difícil o debes hacer frente a una situación
complicada en el trabajo, o podría incluso ser espiritual: deseas crecer
espiritual y físicamente, para entender tu propia existencia cósmica y tu relación
con la existencia y con el más allá.
A continuación, exponemos algunos ejemplos de situaciones que podrían estar
relacionadas con tu propia experiencia personal, y para las que una visualización
creativa podría ayudarte:
1. Tienes un problema con alguien a quien quieres.
2. Tu jefe, o algún compañero de trabajo, es un absoluto tirano.
3. Sufres dolores de cabeza o estrés.
4. Quieres restablecer el equilibrio, la armonía, la calma y la confianza
contigo mismo.
5. Quieres sentirte más relacionado con tu entorno.
6.Quieres mejorar tu estado general de salud y tu bienestar-
Técnicas básicas de visualización
Empieza con una visualización como ésta:
“Yo visualizo la situación que deseo”
Para hacer las visualizaciones que siguen, busca un lugar tranquilo y que sea
confortable. Trata de sentarte con la espalda recta, apoyada en una pared, en
una silla o en el suelo. Deja que tus manos descansen sobre tu regazo, cierra
los ojos y escucha tu respiración. No intentes detener tus pensamientos.
Sabes lo que quieres que suceda, o qué quieres conseguir. Cuando tu mente
esté en un estado de profunda relajación, empieza a ver la situación como si
realmente estuviera sucediendo en ese mismo momento. Al principio puedes
grabarte a ti mismo, o a un amigo,
A medida que te vayas haciendo más experto, puedes empezar a usar esas
técnicas entre la gente, en un autobús, o en un tren, esperando en el andén o en
cualquier situación.
Diez minutos para la autosanación
Empezar tu día
Deja que una bola de luz dorada descienda sobre ti. No impidas que la luz te
bañe con su calor dorado. Permite que la luz se transmita a tu cuerpo y relájate.
Respira lenta y profundamente. Si te ayuda, cuenta hacia atrás desde diez o
veinte hasta uno. Ahora, imagina el lugar donde estás, dondequiera que sea.
Míralo con los ojos de tu mente. Obsérvate a ti mismo sentado en esta
habitación o lugar, y realmente mira este espacio en tu mente. Examina cada
rincón de la estancia, las ventanas y las puertas. Si no puedes mantener la
imagen en tu mente, piensa sobre la habitación. Las imágenes volverán
espontáneamente. Dite, a ti mismo, lo feliz que eres ahora de estar aquí, sea lo
que sea lo que haya sucedido en el pasado. Afírmate, a ti mismo, que tú en este
lugar has sido realmente muy feliz. Puedes recordar algunas cosas buenas que
te hayan sucedido en esa habitación, recuerdos agradables o experiencias
realmente gratas
De pronto te pones en movimiento. Las paredes de la habitación son
transparentes y, sea cual sea el tiempo que haga fuera, tú estás viajando, arriba
y lejos, sobre los tejados y las casas, sobre parques y jardines, sobrevolando
carreteras y lugares familiares. Tú te diriges hacia ti mismo y estás seguro, en tu
propio mundo. Cuando sientas que quieres volver, regresa lentamente a casa,
despídete de tu habitación en la que has sido feliz y promete que pronto volverás
para montar en la alfombra mágica.
Visualización y salud
Imagina alguna tensión que sientas como un muelle interior desenroscándose y
abandonándote. Siente cómo una profunda relajación ocupa su lugar. Cuando
estés relajado, imagina que estás en un edificio asombroso. Puede ser grande o
pequeño, en una isla tropical o en un planeta distante, sea lo que sea lo que
entre en tu mente, déjalo estar. No cuestiones nada ni trates de aplicar la lógica
o la razón. Tú sabes que este edificio es tu personal clínica de salud. Sólo tú
puedes entrar, y sabes que dentro encontrarás la llave de la salud y el bienestar.
Si sufres algún mal o enfermedad por el cual tu cuerpo esté en desacuerdo con
el entorno, o en desequilibrio con algún otro medio, convéncete a ti mismo de
que las respuestas se encuentran dentro de ese edificio
Entra en él y camina por un lugar maravilloso. Olvida todas las ideas
preconcebidas. La habitación está llena de luz de colores diferentes. Dirígete
hacia el color que te atraiga. En este color encuentras una cama blanca.
Túmbate en la cama y da la bienvenida a tu médico personal. Puedes darle un
nombre o una figura. Es tu médico. Sabes que esta persona tiene el mayor
interés y las mejores técnicas. El médico toma tus manos y te pregunta qué
ayuda necesitas. Le explicas exactamente cómo te sientes. El efecto que el
contacto de los dedos de esta persona produce sobre tu cuerpo, tú lo sientes
sobre tu alma. Te sientes muy bien. Es tu médico visualizado quien te conoce
íntimamente y quien puede traerte el verdadero poder curativo. Una bola de luz
rodea el área que necesita atención.
Estás en muy buenas manos y en un perfecto estado de salud que irrumpe en
vitalidad. Cuando sientas que ha llegado el momento de marcharte, da las
gracias a tu médico y déjale, sintiéndote muy bien y sabiendo que puedes
regresar en cuanto lo desees.
Hacer frente al estrés
Imagínate a ti mismo saliendo de tu propio cuerpo; date la vuelta y mírate a ti
mismo, es decir, estás viendo tu propia imagen. Es importante aprender a
hacer esto antes de dar el siguiente paso. Mantén esta imagen de ti mismo en tu
mente. Tómate el tiempo que necesites.
Imagínate un flujo blanco y dorado de pura energía entrando en la imagen de ti
mismo a través de tus sienes. Esta energía dorada y blanca fluye en tu interior y
llena cada parte de tu cuerpo.
Presencia el hecho de que tú estás de pié delante de ti mismo y te estás viendo
lleno de esa clara luz dorada.
La clara luz dorada llena cada rincón de tu imagen, y al mismo tiempo también
limpia y restablece tu salud. De pronto te das cuenta de que la clara luz dorada
sale de tu imagen a través de tus pies, de modo que ahora tienes esta constante
corriente de energía entrando a través de tus sienes, llenando todo tu cuerpo y
saliendo por tus pies.
Imagina también que la energía que sale por tus pies se purifica otra vez,
después de haber arrastrado todas las impurezas y desequilibrios de tu cuerpo,
y se recicla y reabsorve como energía dorada otra vez. Como un ciclo de
interminable energía, tu imagen toma dicha energía, que limpia tu cuerpo,
llevándose con ella los residuos y saliendo a través de las plantas de tus pies,
para entonces purificarla y convertirla de nuevo en energía pura…. Entrando por
tus sienes y llenando todo tu cuerpo
Mantén la imagen de este proceso de energía pura reciclada fluyendo a través
de la imagen de tu cuerpo tanto tiempo como desees. Cuando creas que la has
vizualizado bastante, simplemente imagina que tus sienes y tus pies se cierran,
de manera que la energía quedará CONTENIDA en la imagen de tu cuerpo.
Ahora visualiza tu imagen caminando hacia ti, lentamente dirigiéndose hacia ti y
fundiéndose contigo de nuevo. Reconoce lo bueno que es este sentimiento de
pura energía y alegría y manténlo. Poco a poco estira tus brazos y tus piernas.
Ahora abre los ojos.
Imagina una bola dorada de luz literalmente rodando en tu interior, a través tuyo,
con lentitud. La bola va a penetrar cada parte de ti como un imán mágico,
directamente. Aquí encontrarás tu tensión física. Aquí tú descubrirás la “torcida”
terminación de tus nervios. Puedes empezar a sacudir la bola ligeramente, tanto
como te permita, a través de tu cuello y tus hombros. Déjala reunir el torcido y
escalofriante sonido de nerviosa energía. Visualiza el estrés - y las razones de
ese estrés si la conoces - metiéndose en la bola cuando ésta va a través tuyo,
limpiando tu sistema.
Cuando la bola ha alcanzado tus pies, déjala que ruede hacia el vacío.
Entonces imagina una suave y cálida brisa estimulando y refrescando todo tu
cuerpo. Deja que sople hacia ti, con bastante fuerza. Deja que se lleve y
disperse todas las ansiedades que te han llevado a esta situación.
Cuando sientas que ha llegado el momento, deja que el viento desaparezca a
través del horizonte o a través de un océano azul. Poco a poco sal de tu
profunda relajación. Respira lenta y profundamente y, por último, abre los ojos
Mejorar las relaciones personales
Imagina la persona o relación que quieras mejorar. Mantén esa imagen en tu
mente, o mantén el pensamiento en tu mente que resuma la situación, tan
claramente como te sea posible. (Esta claridad es muy importante.) Cuando
estés profundamente relajado te darás cuenta de que eres capaz de precisar tu
atención. Crea un escenario para ti en el cual te encuentres en una situación
positiva con esa persona. Imagina una conversación que te gustaría tener, y
afirma en el tiempo presente que esto está sucediendo en ese momento. No
desees que suceda; visualiza que está sucediendo realmente. Dite, a ti mismo
en tu estado de visualización, que te estás relacionando verdaderamente en un
positivo y significativo camino con la otra persona, o que él o ella te está
prestando verdadera atención. Visualízate a ti mismo cerca de alguien a quien
amas o que deseas amar. Visualiza y vierte energía a la situación en la que
puedes estar teniendo dificultades con alguien. Visualiza todo esto como si
estuviera sucediendo.
Visualización de tus más profundos deseos
Imagina que estás entrando en una gran burbuja. Ésta es tu propia y personal
burbuja de prosperidad. Ahora puedes visualizarte de verdad teniendo
exactamente lo que quieres tener o siendo el tipo de persona que pretendes ser
o viviendo el estilo de vida que más desees. Esto no es un deseo. Debes verter
todo tu poder en tu estado de visualización, el cual deber ser aquí y ahora. Los
has alcanzado. Esto es lo que sientes como el ser que quieres ser y donde tú
quieres ser.
Puedes imaginar un mundo o universo dentro de personal burbuja, la cual está
protegiendo tus deseos de las fuerzas elementales del exterior. No estás loco.
En este lugar puedes ser, o tener, todo lo que más quieres.
Cuando sea el momento, y sólo tu sabrás cuándo lega el momento, libera la
burbuja y déjala ir. Mírala ascendiendo hacia el cosmos con todos tus deseos
encerrados dentro. Ahora puedes tener la seguridad que atraerás del universo
aquello que realmente necesitas para ser feliz.
Es importante que seas consciente de que repitiendo estas sesiones de
visualización será cómo empezarás a ver resultados. Simplemente sentándote y
deseando algo no conseguirás que por arte de magia suceda. La visualización
es en realidad un viaje de autodescubrimiento. Derribar ideas preconcebidas
sobre ti mismo puede conducirte a encontrar lo que realmente quieres y deseas,
distinto a lo que tú creías que querías. Ésta es una poderosa herramienta de
desarrollo para alcanzar salud, estatus o una relación concreta.
Gloria Dawson y David Callinan
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