Tú estas a cargo de tu vida y eres capaz de hacerla maravillosa
Lo que la gente dice de ti no tiene nada que ver contigo. No es lo que la gente te dice o te hace sino lo que tu haces con eso. La gente habla sobre sus propias experiencias y creencias y esas no son las mismas que las tuyas. Cuando la gente habla o actúa no están pensando en ti, están pensando en ellos mismos. Ellos proyectan sus problemas en los demás (tú) y luego los culpan (a ti) por lo que a ellos no les gusta sobre ellos mismos.
Cuando alguien dice algo que lastima tus sentimientos, no es por lo que ellos están diciendo, es por los programas (experiencias, recuerdos, creencias) que tú tienes guardados en tu mente subconsciente y que armonizan con las palabras que ellos están diciendo y esa conexión desencadena tus pensamientos, sentimientos y emociones que te lastiman. Cuando reaccionas en contra de ellos, tú sólo estás expresando tus propios programas, entonces, no es lo que ellos dicen, es lo que hay en tu mente. Las preguntas que puedes hacerte son, ¿Por qué me lastiman esas palabras o acciones? ¿Por qué me siento así cuando ellos hacen o dicen eso? Estoy segura de que encontrarás alguna respuesta que te ayude a sanar tu vida y a aprender de eso, en vez de reaccionar y crear sentimientos en contra de los demás que sólo te lastiman mas.
Realmente creo que no hay gente mala en el mundo. Cuando la gente nos lastima o se comporta de cierta forma (equivocada), de alguna manera, ellos sólo están repitiendo patrones de comportamiento, patrones que han aprendido a través de los años. Estas personas sólo expresan sus propias creencias, experiencias, recuerdos y emociones. Desafortunadamente esa es la única forma que ellos conocen para expresarse. Están expresando sus frustraciones, inconformidades, tristezas, inseguridades, dolor y quejas. Están hablando o actuando desde sus propias emociones, no están realmente interesados en nosotros. Por eso es que nosotros, como sociedad, somos responsables de educar a nuestros hijos y ser buenos modelos para ellos. Repetimos patrones de comportamiento generación tras generación; es una reacción en cadena y nosotros podemos romperla si tomamos responsabilidad en nuestras vidas.
Cuando entendemos que lo que la gente hace o dice no tiene nada que ver con nosotros, no tomamos las acciones o palabras de forma personal. No les damos permiso de lastimarnos o de controlar nuestras vidas. Cuando nos damos cuenta de que la gente sólo está hablando por sus propias creencias, experiencias y recuerdos, y repitiendo patrones de comportamiento, no tenemos la necesidad de reaccionar o actuar en contra de ellos. Cuando realmente entendemos eso, no acumulamos sentimientos negativos y podemos perdonarlos si necesitamos hacerlo.
Estamos muy acostumbrados a vivir tratando de complacer a los demás y preocuparnos por la opinión que tienen de nosotros y si no nos aceptan nos sentimos indignos y tristes. Nuestro valor no depende de lo que los demás piensen o digan. Somos dignos y valiosos por naturaleza, pero necesitamos amarnos a nosotros mismos primero y experimentar ese amor cada día en nuestra vida. Es difícil reconocer que somos valiosos cuando hemos estado rodeados de gente negativa que dice sólo cosas malas o equivocadas de nosotros, y especialmente cuando eramos niños, o si fuimos criados por gente frustrada e infeliz. Pero si, tú puedes cambiar tu vida tan pronto como tomes la decisión. Tú eres responsable de tu vida y eres el único que puede cambiarla.
Nunca es demasiado tarde para aprender y entender que lo que la gente dice sobre ti no tiene nada que ver contigo. Estoy segura de que si aplicas este principio a tu vida diaria, tu vida cambiara. Tendrás la oportunidad de practicar tu autenticidad, ser tu mismo y olvidarte de pasar la vida agradando a los demás. Aprenderás a no tomar las cosas personales, por lo que será más fácil entender a las personas y comunicarte con ellos. Crearás relaciones maravillosas y agradables y tendrás una vida hermosa. Tienes solamente una vida y solo tú puedes hacerla valiosa.
Empieza ahora, no mañana
Patricia Anaya
No hay comentarios:
Publicar un comentario