SIGUETE A TI MISMO

SÍGUETE A TI MISMO por Mahatma Das




Yo viajo por el mundo enseñando principios espirituales. Lo que sigue a continuación es una interesante discusión que tuve con unos jóvenes.

“Yo no necesito a Dios”, dice el vocero. “Yo tengo mi propio modo”.

“OK”, yo digo. “¿Qué ‘modo’ es ese modo?

Él estaba esperando esa respuesta. Titubea. Finalmente habla, “Yo creo en mi propio ser. Yo dependo de mi propio ser. Yo sigo a mi propio ser”.

“Tú crees en tu propio ser, dependes de tu propio ser, y sigues a tu propio ser. Grandioso…. ¿Quién es ese ser?”

Más titubeo. Trata de contestar, pero se da cuenta de que no puede.

Le pregunto entonces, “¿Cómo puedes creer en él, depender de él, y seguirlo a él si ni siquiera sabes lo que es?”

Contesta con silencio.

“Por esto necesitas el conocimiento espiritual y una práctica espiritual. Esto te ayudará a darte cuenta de tu propio ser”.

“El primer punto es que el ser no es el cuerpo”.

Él responde, “Sí, yo no soy este cuerpo. Soy la colección de todos mis ideales”.

“Estos ideales no son el ser”, yo digo. “Todos están impresos en ti desde afuera de ti mismo”.

Hablamos un poco más. Eventualmente están de acuerdo: El ser está más allá del cuerpo y los ideales de la mente. Luego pregunto: “Sabemos lo que el ser no es. ¿Pero qué es?”

“¿El espíritu?”

“Sí. El ser es una partícula de espíritu, una parte del espíritu completo. Así como la cuerda de una guitarra es parte de la guitarra completa. Si tú arrancas esa cuerda de la guitarra y la echas a la acera allá afuera - ¿qué valor tiene?”

“Ninguno”.

“Sí, es inútil. Pero cuando conectas esa cuerda a la guitarra completa, la afinas y todo eso – tiene mucho valor, ¿no es así? Puede hacer música. Puede hacer canciones. La cuerda es valiosa cuando trabaja para la guitarra completa, pero por su cuenta, sentada en la acera, no tiene valor. La parte se vuelve inútil cuando no está conectada a la unidad completa”.

Asienten.

“El ser, el espíritu individual –continué– es parte del espíritu completo. Cuando el ser trata de vivir separado del ser completo, él o ella son como la cuerda de guitarra oxidándose en la acera. Y eso es lo que hemos hecho – desconectarnos a nosotros mismos de lo completo. Así como la cuerda de la guitarra, nuestro valor es olvidado, nuestro significado es olvidado. Mucho de nuestro tiempo se usa tratando de llenar los huecos de una vida vacía mientras vagamos en la acera”.

“La verdadera naturaleza del ser –yo explico – es servir al ser completo, así como la cuerda sirve a la guitarra completa y alcanza su más alta expresión y plenitud en el proceso”.

“¿Qué quieres decir con ‘Ser completo’?”, ellos preguntan.

“Ustedes saben: Dios. Como quiera que lo llamen. Jesús, Krishna, Allah… La más alta expresión del ser es servir a Dios”.

“Oh”.

“Eso es lo que realmente quiere decir el ‘seguirte a ti mismo’. Eso es lo que llamamos conciencia de Krishna”.

Ellos se quedaron pensativos. Yo me quedé agradecido.

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