jueves, 16 de octubre de 2014

HERMANA DE LAS ESTRELLAS

Mis hermanas de las estrellas, desaten la humanidad que las mantiene tan enganchadas en todos los papeles... Ver más que representaron alguna vez. La vibración y la energía de su luz deslumbran a las constelaciones que posan la vista en ustedes. El viento siente envidia mientras sopla a través de su cabello y su vida, porque ve su bella naturaleza. Ve lo que fueron alguna vez y en lo que ansían convertirse. Sepan en este momento y en esta vibración y esta intersección de luz y vida que son merecedoras de la grandiosidad en la que no pudieron convertirse en el pasado.

Ustedes son una conjunción de todos sus miedos, de todos sus sueños, de todos sus deseos. Son la conjunción del tiempo y el espacio y del cielo y el infierno. Son el destino de este hermoso planeta en el que están. Ustedes sostienen la clave vibratoria que acompaña a tantos hacia un portal, un lugar seguro, y en este lugar seguro los elevarán para que no tropiecen. Ustedes los elevarán al beber por ellos, dormir por ellos, orar por ellos, mantener el fuego encendido para ellos. Los elevarán en su canción, en su risa y en su manera juguetona, porque es lo que siempre han hecho.

Esta vida es un tiempo de gran regocijo y para muchos de ustedes es la última vez en la Tierra tal como la conocen. La Tierra va camino a convertirse en una expresión estelar. Les pedimos que acepten esos defectos que con tanto empeño tratan de ocultar y evitar que vean los demás. Les pedimos que acepten y amen todas las cosas estúpidas que hacen a lo largo del día y todas las imperfecciones que llevan tan bien, porque todo en la naturaleza es hermoso como lo son ustedes. El entrelazamiento de las hojas, del césped, del viento y de ustedes es la más bella de las danzas. Su valía no tiene precio y en esa vibración incalculable necesitan dar cabida a todos los sueños en su corazón. No se restrinjan. No pisen el freno cuando en su corazón anhelan tan intensamente consumar sus deseos que no son más que una diminuta semilla de creación esperando nacer.

estrellas
Este es el momento de encarar todos sus miedos. Este es el momento de avanzar luciendo un emblema de valor. Este es el momento de soñar en grande. No teman las predicciones porque el nivel vibratorio en el que existen es un lugar seguro que está más allá del alcance de lo que vuelve tan temerosos a otros. Deben creer sin una sombra de duda; miren su sombra y acepten cada parte de ella porque ustedes la llevan porque se la han ganado. Cada valle de lágrimas, de muerte y extinción por el que han pasado ahora llega a un punto de reflexión y en este reflejo habrá un collage de espejos. Al mirarse desde cada ángulo, se verán diferentes y ese es su don.

Ustedes son cada papel que hayan representado alguna vez y todo se conjuga en este lugar y este momento. No se sientan avergonzados por lo que les sucedió en el pasado sin importar qué forma tomó eso en esta vida o en otras. Revístanse completamente de todos los remanentes de lo que fueron alguna vez porque ellos los convierten en la mujer multidimensional que son en este instante del tiempo.

Ustedes no son un sabor de Ella, ustedes son cada aspecto de Ella. Los próximos tres años las traen a una situación planetaria que nunca experimentaron antes. No había humanos en la Tierra en la última conjunción galáctica y esta es la primera vez que un planeta entrará en el estrellato con habitantes en ella. Cada papel que han representado les resulta de utilidad ahora. Cada emblema de valor, cada temor, cada poder, cada vergüenza, están envueltos en un capullo de luz femenina. Hónrenlos y compréndanlos. El cuerpo físico debe pasar por todos estos cambios. Gritará, pataleará y se sentirán como si se estuviesen muriendo. Este es todo un juego para disminuirlas. Pasarán por los miedos, los ataques de pánico, las iras, los sueños devastadores y llegarán a un punto de total claridad. Serán las primeras personas en hacer esto. Yo soy la Mujer Búfalo Blanco y las dejo en Honor.

Gillian MacBeth-Louthan

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