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viernes, 11 de octubre de 2013

ADN Y EMOCIONES


Adn y Emociones



ADN y EMOCIONES

A continuación tres asombrosos experimentos con el ADN que prueban las cualidades de autosanación del mismo en consonancia con los sentimientos de la persona, como fue reportado recientemente por Gregg Braden en su programa titulado Sanando Corazones/Sanando Naciones: La Ciencia de La paz y el Poder de La Plegaria.

Gregg Braden empezó como científico e ingeniero antes de que se formulara las grandes preguntas.

EXPERIMENTO 1

El primer experimento fue realizado por el Dr. Vladimir Poponin un biólogo cuántico. En este experimento se comenzó por vaciar un recipiente (es decir se creo un vacío en su interior) y luego lo único que se dejó dentro fueron fotones (partículas de luz). Se midió la distribución de estos fotones y se encontró que estaban distribuidas aleatoriamente dentro del recipiente. Este era el resultado esperado.

Entonces se coloco dentro del recipiente una muestra de ADN y la localización de los fotones se midió de nuevo. En esta ocasión los fotones se ORGANIZARON EN LÍNEA junto al ADN. En otras palabras el ADN físico produjo un efecto en los no físicos fotones.

Después de esto la muestra de ADN fue removida del recipiente y la distribución de los fotones fue nuevamente medida. Los fotones PERMANECIERON ORDENADOS y alineados en donde había estado el ADN.

¿A que están conectadas las partículas de luz?

Gregg Braden dice que estamos impelidos a aceptar la posibilidad de que existe un NUEVO campo de energía y que el ADN se está comunicando con los fotones por medio de este campo.



EXPERIMENTO 2

Este experimento fue llevado a cabo por los militares. Se recogió una muestra de leucocitos (células sanguíneas blancas) de un número de donantes. Estas muestras se colocaron en una habitación equipada con un equipo de medición de los cambios eléctricos. En este experimento el donante era colocado en una habitación y sometido a "estímulos emocionales" consistentes en vídeo clips que generaban emociones en el donante.

El ADN era colocado en un lugar diferente al del donante, pero en el mismo edificio. Ambos donante y su ADN eran monitoreados y cuando el donante mostraba sus altos y bajos emocionales (medidos en ondas eléctricas) el ADN expresó RESPUESTAS IDÉNTICAS Y AL MISMO TIEMPO. No hubo lapso y tiempo retraso de transmisión.

Los altos y bajos del ADN COINCIDIERON EXACTAMENTE con los altos y bajos del donante.

Los militares querían saber cuan lejos podían separar al donante de su ADN y continuar observando ese efecto. Ellos pararon de hacer pruebas al llegar a una separación de 80 Kilómetros entre el ADN y su donante y continuaron teniendo el MISMO resultado. Sin lapso y sin retraso de transmisión.

El ADN y el donante tuvieron las mismas respuestas al mismo tiempo.

¿Qué significa esto?

Gregg Braden dice que esto significa que las células vivas se reconocen por una forma de energía no reconocida con anterioridad. Esta energía no se ve afectada ni por la distancia ni por el tiempo. Esta no es una forma de energía localizada, es una energía que existe en todas partes y todo el tiempo.



EXPERIMENTO 3

El tercer experimento fue realizado por el Instituto Heart Math y el documento que lo soporta tiene este título: Efectos locales y no locales de frecuencias coherentes del corazón y cambios en la conformación del ADN (No se fijen en el titulo, la información es
increíble)

Este experimento se relaciona directamente con la situación con el ántrax.

En este experimento se tomo el ADN de placenta humana (la forma más prístina de ADN) y fue colocado en un recipiente donde se podía medir los cambios del mismo. Se distribuyeron 28 muestras en tubos de ensayo al mismo número de investigadores previamente entrenados. Cada investigador había sido entrenado a generar y SENTIR sentimientos, y cada uno de ellos podían tener fuertes emociones.

Lo que se descubrió fue que el ADN CAMBIO DE FORMA de acuerdo a los sentimientos de los investigadores.

1. Cuando los investigadores sintieron gratitud, amor y aprecio, al
ADN respondió RELAJÁNDOSE y sus filamentos estirándose. El ADN se hizo más largo.

2. Cuando los investigadores SINTIERON rabia, miedo o estrés, el ADN respondió APRETÁNDOSE. Se hizo más corto y APAGÓ muchos de los códigos.

¿Alguna vez se han sentido "descargados" por emociones negativas? ahora saben porque sus cuerpos también se descargan. Los códigos del ADN se conectaron de nuevo cuando los investigadores tuvieron sentimientos de amor, alegría, gratitud y aprecio.

Este experimento fue posteriormente aplicado a pacientes con VIH positivos.

Ellos descubrieron que los sentimientos de amor, gratitud y aprecio crearon 300.000 veces mayor RESPUESTA INMUNE que la que tuvieron sin ellos.

Así que aquí tenemos una respuesta que nos puede ayudar a permanecer con salud, sin importar cuan dañino sea el virus o la bacteria que este flotando alrededor. Manteniendo los sentimientos de alegría, amor, gratitud y aprecio.

Estos cambios emocionales fueron más allá de ser efectos electromagnéticos.

Los individuos entrenados para sentir amor profundo fueron capaces de cambiar la forma de su ADN. Gregg Braden dice que esto ilustra una nueva forma de energía que conecta toda la creación.

Esta energía parece ser una RED TEJIDA ESTRECHAMENTE que conecta toda la materia.
Esencialmente podemos influenciar esa red de creación por medio de nuestra VIBRACIÓN.


RESUMEN:

¿Que tiene que ver los resultados de estos experimentos con nuestra situación presente?

Esta es la ciencia que nos permite escoger una línea de tiempo que nos permite estar a salvo, no importa lo que pase.

Como Gregg explica en su libro El Efecto de Isaías, básicamente el tiempo no es solo lineal (pasado, presente y futuro) sino también profundidad.

La profundidad del tiempo consiste en todas las líneas de tiempo y de oración que puedan ser pronunciadas o que existan. Esencialmente, sus oraciones ya han sido respondidas.
Simplemente activamos la que estamos viviendo por medio de nuestros SENTIMIENTOS.

Asi es como creamos nuestra realidad, al escogerla con nuestros sentimientos. Nuestros sentimientos están activando la línea de tiempo por medio de la red de creación, que conecta la energía y materia del universo.

Recuerda que la ley del Universo es que atraemos aquello en lo que nos enfocamos.

Si te enfocas en temer cualquier cosa sea la que venga, estas enviando un fuerte mensaje al Universo para que te envíe aquello a lo que le temes. En cambio si te puedes mantener con sentimientos de alegría, amor, aprecio o gratitud y enfocarte en traer mas de eso a tu vida automáticamente vas a evadir lo negativo.

Estarías escogiendo una LÍNEA DE TIEMPO diferente con estos sentimientos.

Pueden prevenir el contagiarse de ántrax o cualquier otra gripe o virus, permaneciendo en estos sentimientos positivos que mantiene un sistema inmune extraordinariamente fuerte.

Así que esta es una protección para lo que venga: Busca algo por lo cual estar alegre todos los días, cada hora si es posible, momento a momento, aunque sea unos pocos minutos. Esta es la más fácil y mejor de las protecciones que puedes tener.

Gregg Braden es el autor de "The Isaiah Effect" and "Awakening to
the Zero Point" y Despertando al Punto Cero)

Fuente original : www.greggbraden.com/
Traducción Abjini Arraíz



EL OPTIMISMO ATRAE LA SALUD

Se ha comprobado científicamente que los pensamientos positivos y las situaciones de placer permiten liberar neurotransmisores y ciertas hormonas que inciden en una sensación de bienestar físico y psicológico general del organismo.

Es cierto que los pensamientos “positivos" y “la buena onda" atraen bienestar y buena salud. ¿Se comunican nuestros pensamientos con los distintos órganos del cuerpo? ¿Qué sucede cuando nos emocionamos, nos asustamos, nos deprimimos, nos reímos o nos entusiasmamos ante algún acontecimiento o noticia que nos impacta?

Indudablemente, al igual que nuestro cerebro es capaz de registrar los estímulos físicos, el cuerpo también registra los estímulos emocionales y responde ante ellos.

¿Cómo responde? Mediante la liberación de verdaderos “Mensajeros de los pensamientos" llamados neurotransmisores o neuropéptidos (neurohormonas). Podríamos decir que éstas son sustancias liberadas por el cerebro o las terminaciones nerviosas que actúan a distancia sobre los distintos órganos del cuerpo.

Ante cualquier situación de estrés se prende una especie de "alarma roja" a nivel del hipotálamo, que mediante la liberación de determinados neurotransmisores le avisa a la glándula pituitaria (más conocida como hipófisis) que debe activarse para liberar, por ejemplo, Beta-endorfina, hormona rnelanoestimulante y la hormona ACTH (hormona adrenocorticotropa), que actúa sobre las glándulas adrenales produciendo finalmente la liberación de los famosos glucocorticoides.

Pero estos mensajeros de los pensamientos no sólo se liberan a nivel del cerebro sino que también son liberados por células de otros órganos como, por ejemplo, la protagonista del verano: la piel.

Las células que constituyen nuestra piel responden a los rayos ultravioleta del sol liberando la hormona melano-estimulante (por eso nos bronceamos) pero además liberan Beta-endorfinas que ejercen un efecto analgésico (calman el dolor), antiinflamatorio y regulador del sistema inmune de la piel.

¡Atención!, hemos nombrado el sistema inmune.

¿Por qué introducirnos el sistema inmune si estamos hablando del cerebro? Porque en la actualidad al sistema inmune se le considera una especie de "cerebro móvil”, que, al igual que los órganos de los sentidos detectan lo que ocurre en el exterior, sus células detectan lo que está pasando dentro del organismo.

Frente a un estrés inmunológico como puede ser una infección u otro proceso, el sistema inmune también es capaz de liberar estos “mensajeros de los pensamientos” y es capaz de recibir la acción de cualquiera de ellos liberado por el sistema nervioso. Se establece una verdadera “conversación” entre ambos sistemas. Es decir que la piel, el sistema nervioso y la inmunidad no son sistemas independientes sino que están estrechamente asociados y usan el mismo lenguaje.

Células del sistema inmune liberan neurotransmisores, entre ellos Beta-endorfinas. Estos mediadores químicos han sido llamados también “las hormonas de la felicidad”, porque producen un estado de bienestar general y se liberan en situaciones placenteras (risa, sexo, ejercicio físico). A nadie le pasa inadvertido el hecho de que los días de sol radiante nos sentimos eufóricos, con más energías y con una alegría a veces inexplicable teniendo en cuenta los acontecimientos que nos toca vivir actualmente.

Llegamos a la conclusión, entonces, de que los estados placenteros (cada uno sabrá cuál es el suyo) estimulan la liberación de estos potentes antiinflamatorios que se ha visto actuarían en determinadas patologías (artritis reumatoidea, esclerosis múltiple, psoriasis, eczemas alérgicos, vitiligo, enfermedades gastrointestinales), mejorando el estado general del paciente.

Entonces, si volvemos a leer las preguntas que inician este artículo concluiremos que existe una verdadera conexión entre el cerebro-cuerpo, lo que explicaría la influencia de nuestros estados de ánimo sobre nuestra salud y que existiría una explicación científica para aquello de que la “buena onda atrae buena salud”.

Por lo tanto aunque ahora nos cueste: tratemos de reírnos lo más posible, a lo mejor nos ahorramos futuros medicamentos.

BS

MAS INFO: http://buenasiembra.blogspot.com/2011/08/las-emociones-y-su-reflejo-en-organos.html

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